22 Mar La flexibilidad y su importancia en el sector hotelero
Seguro que Charles Darwin nunca imaginó que sus planteamientos sobre la necesidad de las especies de adaptarse para seguir viviendo podrían aplicarse a un sector como el hotelero, pero lo cierto es que la frase “adaptarse o morir” podría ser el lema hoy en día de cualquier propietario de un hotel. Y es que la flexibilidad y la creatividad se han vuelto vitales a la hora de volver al trabajo en la nueva situación del sector hotelero dejada por el Covid-19.
La flexibilidad en las reservas
La incertidumbre ha provocado un desplome nunca visto en las reservas anticipadas de los hoteles, tanto en España como en el resto del mundo. Antes ya estaban en auge las reservas last minute, pero un alto porcentaje de los viajeros seguía reservando con meses de antelación para asegurarse buenos hoteles. Ahora las reservas a medio y largo plazo son inexistentes, pero esto no quiere decir que la gente no quiera viajar. Al contrario, en cuanto las restricciones cambian un poco, hay un fuerte repunte en las reservas de escapadas y vacaciones, pero siempre con el punto de mira puesto en el corto plazo.
Para animar todo tipo de reservas, es importante flexibilizar las reservas y dar facilidades a los huéspedes para que reserven en nuestro hotel con la posibilidad de cambiar las fechas, optar por un bono canjeable más adelante o incluso cancelar la estancia si les resulta imposible moverse por nuevas restricciones.
Booking y Expedia cancelaron de forma unilateral muchas reservas no reembolsables durante el confinamiento de 2020 y muchas voces los acusaron de querer fidelizar a sus clientes a costa de los hoteles. Quizá esta maniobra de las principales OTAs supusiera un mazazo para muchos alojamientos, pero lo cierto es que se puede aprender de su estrategia, y es que darles facilidades a los clientes es vital para que apuesten por ti y te confíen su dinero.
Y es por ello que las webs de los hoteles, así como sus redes sociales y anuncios, deben priorizar en la actualidad algunos datos clave que den tranquilidad y confianza a sus clientes, como el hecho de que las reservas son flexibles, que se dan a los clientes facilidades para cambiar sus fechas en caso de ser necesario, que se les dará un bono si no pueden viajar en las fechas acordadas, etc.
Las reservas y cancelaciones deben agilizarse para atraer al mayor número de viajeros posible y por ello resulta muy útil contar con un buen software de gestión integral para hoteles, como Noray Htl, que permite gestionar con facilidad reservas y cancelaciones, unificando los distintos canales por los que llegan las peticiones y permitiendo ver en todo momento las habitaciones que quedan libres, la ocupación actual y futura, la disponibilidad de recursos, etc. De este modo, y al usar una herramienta profesional de gestión hotelera, se agilizan los procesos de reserva y cancelación, haciéndolo todo mucho más fácil tanto para trabajadores como para huéspedes.
Creatividad para adaptarse a los nuevos clientes
Si la flexibilidad es vital para afrontar la nueva situación en el sector hotelero, la creatividad no lo es menos. Como se ha mencionado más arriba: renovarse o morir. El turismo es un sector siempre cambiante, pues cada generación busca un tipo de vacaciones diferente, pero la pandemia ha provocado el auge de determinados tipos de viajero hasta ahora poco (o nada) explotados en España. En el artículo “Creatividad y flexibilidad para dotar a los hoteles de nuevos usos“, de Hosteltur, se mencionan, por ejemplo, a los nómadas digitales, aunque también se habla de coworking, coliving y teletrabajo.
Perfiles de huéspedes que hasta ahora no se tenían presentes en la oferta hotelera de nuestro país, pero que han cobrado vigencia durante 2020 y 2021 ante la explosión de personas que trabajan desde casa y cuentan con un horario y calendario laboral flexible.
Muchos establecimientos están adaptando sus habitaciones para darles un uso profesional, equipándolas con material de oficina para conseguir un espacio de trabajo óptimo para los teletrabajadores. Y aunque es previsible que la relevancia de este tipo de viajeros se vea eclipsada por el viajero de toda la vida cuando la situación mundial se normalice, el sector hotelero no debe olvidar que existen distintos nichos de mercado, pues podrían ser un modelo de negocio interesante para aquellos hoteles que se especialicen en este (u otro) perfil de cliente poco habitual.
Asimismo, otros muchos alojamientos han optado por centrarse en qué podían ofrecerles a las personas de su entorno. En la mayoría de los casos, los hoteles están pensados para turistas que vienen de lejos, pero han proliferado las opciones creativas para mantener en funcionamiento los establecimientos con la población local. Es por ello que muchos hoteles han apostado por productos más personalizados y exclusivos que pueden comercializarse como experiencias románticas, de relax, aventura, de desconexión… El turismo nacional y local es clave ahora mismo y saber explotarlo es vital para la adaptación a corto y medio plazo.
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