12 Sep Liderazgo: sé tu propio líder
Tras todo lo vivido, ya nada volverá a ser como antes. Con lo que hemos vivido, hemos sufrido, evidentemente, cambios. Algunos económicos y sanitarios, pero otros en el ámbito social, cultural y tecnológico. La motivación y el liderazgo serán de las actividades más cruciales a asegurar en las organizaciones actuales junto con, por supuesto, los cambios tecnológicos.
Aquellas empresas analógicas que hasta ahora eran rígidas, opacas, burocráticas, etc. pasarán a la historia. Estamos en la senda de emprender un nuevo futuro basado en la colaboración, en transmitir conocimientos y en trabajar en equipo.
Ahora más que nunca el liderazgo se convierte en una habilidad clave: tendremos que ser integradores de ideas y proyectos. Ideas y proyectos en los que además sea partícipe todo el equipo. No pasa nada por experimentar e improvisar, pero lo que tenemos que tener claro es que no nos podemos parar.
Nadie dijo que fuera fácil, hay habilidades que se pueden aprender, formas de comunicarnos, estrategias, tácticas de liderazgo, etc. Pero no podemos adquirir fácilmente los sentimientos, emociones, empatía, control y euforia necesarios para ser líderes de un equipo de forma fácil. En muchas ocasiones, parte de estos conocimientos son innatos y, por la forma de ser de cada uno, ya vienen adquiridos “de serie”. Pero en otros no será así y entonces veremos necesario trabajar en estas actitudes y aptitudes.
¿Cuál crees que será el primer paso para poder liderar con conocimiento?
En mi opinión, parte de conocerse a uno mismo.
Aparentemente simple, no obstante, no creo que lo sea. Debemos aprender a conocer nuestras fortalezas y debilidades, así como trabajar en aquellas cosas que podemos mejorar o reforzar. Y no solamente en relación a nosotros mismos (como líderes), también con nuestros equipos.
¿Cuánto tiempo dedicamos a planteárnoslo o analizar estas cuestiones? ¿Nos planteamos ver en qué cosas pueden mejorar nuestros equipos o qué pueden reforzar con nuestra ayuda?
Asociamos liderazgo a ser jefes, gestionar grupos de personas, pero podemos comenzar a ser líder de nuestros proyectos. En definitiva, a hacerlos nuestros.
Para ello deberemos considerar algunos puntos importantes:
- Establecer metas a nuestros propósitos.
- Desarrollar un plan de acción para alcanzar el objetivo.
- Determinar prioridades de trabajo.
- Plantear fechas límites.
Estos cuatro puntos harán que tengamos claro hacia dónde tenemos que ir, cómo lo tenemos que hacer y en cuánto tiempo.
Para llevarlo a cabo, deberemos considerar en trabajar en algunas acciones que nos acompañarán siempre para cumplir nuestras metas eficientemente.
Existen muchísimos planteamientos, estoy segura qué cada uno podría dar su opinión y cambiar estos puntos por otros, pero en mi opinión la base parte de los siguientes son:
- Obtener el conocimiento necesario para dominar las situaciones.
- Saber transmitir correctamente al resto, para hacer llegar nuestro mensaje claramente. Al cliente o a cualquier otra persona.
- Aprender a escuchar todo es importante, aunque ahora no lo parezca.
- Dominar en todo momento las situaciones que se nos puedan plantear, sin frustrarnos para poder actuar con resolución y efectividad.
- Ayudar a que todo fluya, poniendo soluciones y no problemas.
En definitiva, hagamos nuestro cada proyecto, cada tarea, cada gestión, cualquier cosa que tengamos que hacer. Sentirnos líder de algo puede ser la motivación que nos falta y recordemos las recomendaciones mencionadas: trabajemos en nosotros mismos, así como en los puntos mencionados como base.